Para Ver
Dirección y guión: Deepa Mehta
Nacionalidad: India y Canadá
Año: 2005
Francesca Toffano
Pocas veces se logra en el cine el rigor estético y ético que logra esta película que analiza con profundidad el problema social de la marginación y la pobreza a las que, todavía hoy en día, están condenadas las mujeres viudas en India por viejas costumbres y leyes religiosas. Alejada de un sentimentalismo fácil, la directora aborda el tema desde el corazón de la humanidad de los personajes que muestran al espectador tanto sus luces como sus sombras, su fuerza y su debilidad. La película es la segunda de una trilogía de Deepa Mehta sobre India y la mujer, siendo la primera Fuego y la próxima Tierra. La directora, que desde hace muchos años vive en Canadá, es el símbolo de la libertad que anhela para las mujeres de su tierra y que odian algunos fundamentalistas, al grado que, por las manifestaciones en su contra, tuvo que rodar la película en Sri Lanka. La historia comienza con una niña (casada por motivos económicos) que está a punto de enterrar a su anciano esposo, y a continuación será abandonada por los padres en una casa para viudas, como dicta la costumbre hindú. La rebeldía y la tristeza de la niña poco a poco serán domadas por la fuerza y la ternura de las otras viudas, que comparten con ella la condición de intocables (invisibles) para el mundo exterior. Surge inesperadamente una historia de amor que por un momento nos hace creer que será posible vencer esas barreras invisibles, dejándonos el alma totalmente destrozada al enfrentarnos con una realidad aplastante que imposibilita la realización del deseo. La mirada de la cámara es impecable al retratar el peso de esa prisión social en contraste con la inmensidad de la libertad exterior. Agua es una película inolvidable y bellísima, que nos muestra una marginación de la que ni siquiera somos conscientes.