Consejo de Redacción de Utopía
Ante el anuncio realizado por ETA de ruptura del Alto el Fuego, como colectivos cristianos, queremos manifestar nuestra condena radical a tal decisión.
Si, desde un punto de vista evangélico, siempre es muy difícil justificar cualquier tipo de violencia, especialmente si atenta contra la vida y la integridad de las personas, nos parece evidente que en las actuales circunstancias de nuestra sociedad no existe la menor justificación para defender por medio de la violencia cualquier tipo de reivindicación política, por muy justificada que se considere. No se pueden alegar motivos políticos para atentar contra la vida de cualquier persona, y hacerlo sería un crimen sin paliativos.
Las legítimas reivindicaciones que puedan estar detrás de la actitud de ETA pierden todo su valor si se trata de emplearlas para justificar el crimen o la amenaza. El solo hecho de anunciar la reanudación de “la lucha armada” tiende a crispar el clima político y social, y a favorecer las posturas más irracionales, reaccionarias y fundamentalistas de nuestra sociedad, haciendo cada vez más difícil cualquier solución razonable al largo y penoso conflicto que se padece en el País Vasco.
Invitamos a otros colectivos de cristianos de base a sumarse a esta postura para manifestar de una manera masiva el rechazo total a la violencia y a las razones que se pretendan esgrimir, desde cualquier campo, para legitimar lo que es inaceptable terrorismo.
(31 de julio de 2007)