Trabajo y cuidados dignos.
Mario Perdicio. Senda de Cuidados.
No es sólo un lema, detrás de esta reivindicación se esconde una cruda realidad para muchas personas, pero también un deseo y una afirmación de cambio.
A día de hoy, en las sociedades en las que nos ha tocado vivir, la gran mayoría nos vemos en la obligación de trabajar asalariadamente para conseguir los medios materiales que aseguran nuestra subsistencia. Pero también debemos afrontar, de una u otra forma, la reproducción de nuestras propias vidas, es decir, aquellas tareas invisibilizadas que sustentan el resto: los cuidados.
Lejos de la ilusión moderna de autosuficiencia, todos y todas hemos necesitado o vamos a necesitar apoyo de otras personas en algún momento de nuestras vidas. Somos vulnerables a todos los niveles, especialmente bajo este sistema que genera desigualdades por todas partes y que desarma continuamente nuestra capacidad de resistencia a nivel colectivo y comunitario. Si bien es cierto que estas dos cuestiones, la del trabajo y la de los cuidados, nos tocan de una u otra forma, no todas las personas tenemos la misma capacidad de respuesta debido a las distintas formas de dominación a las que estamos expuestos y expuestas. En esta coyuntura es necesario explicitar que son precisamente las mujeres, y sobretodo las migrantes, quienes soportan, no por casualidad, sobre sus cuerpos y sus mentes la mayor parte del peso de sustentar su vida y la del resto mediante el trabajo por cuenta ajena y las tareas domésticas para el sostenimiento de los hogares. Por supuesto, tampoco podemos olvidarnos de aquellas personas a las que les son negados incluso sus derechos más básicos. Hablamos de gente que a nuestro alrededor ni siquiera puede optar por una atención sanitaria que antes era de carácter universal y que tienen que buscarse la vida de las más diversas formas para sobrevivir. Sin papeles, sin derechos, perseguidos policialmente, encerradas en CIEs…
No hay derecho!, que dirían nuestros abuelos y abuelas.
¿Qué podemos hacer?
Fueron estas inquietudes las que nos motivaron desde la confluencia en diferentes espacios y luchas para juntarnos, debatir y lanzar la propuesta de Senda de Cuidados. Por un lado, la necesidad de ofrecer una alternativa real a aquellos y aquellas que lo tienen más difícil, principalmente por haber tenido que abandonar su lugar de origen para poder vivir. Pero también, la voluntad de darle a los CUIDADOS la importancia y dignidad que merecen por ser la base de nuestra existencia. Cuidados y atenciones que son especialmente importantes cuando son personas cercanas y queridas quienes los requieren, como es el caso de los y las mayores que durante tantos años han sido el soporte de nuestras vidas. Queríamos aportar nuestro granito de arena para cambiar la sociedad y poner en primer plano a las personas y sus necesidades. Por suerte, otras compañeras y colectivos como Territorio Doméstico ya habían abierto el camino y no nos encontraríamos solos en esta senda.
Apuesta
Senda de Cuidados es una apuesta por cuidarnos entre todos y todas, por generar oportunidades laborales y cuidados que de verdad merezcan la pena y por romper con esas fronteras que nos rodean. Tomamos la forma de entidad no lucrativa porque creemos que no todo es mercancía y que es el afán insaciable por el beneficio económico, inherente a este sistema, lo que nos ha llevado hacia esta crisis económica, lo que ha generado este paisaje desolador en el que nos encontramos.
Pretendemos ofrecer apoyos y cuidados en el hogar para todas aquellas personas que lo necesitan: mayores, niños y niñas, personas con diversidad funcional… Personas importantes a la vez que vulnerables, que han sido y/o serán quienes den sentido a nuestras vidas. Desde la profesionalidad y la cercanía de cuidadores y cuidadoras comprometidas con esta tarea, soñamos y creemos que es posible una atención humana y cálida para ellas.
También queremos dignificar el trabajo en cuidados y darle el valor que merece. Entendemos que unos cuidados dignos y de calidad pasan necesariamente por unas condiciones laborales también dignas y un reconocimiento social de esta labor. Creemos que ésto es imprescindible e irrenunciable. Y por supuesto, también hemos querido dotar a las personas que trabajan cuidando de los demás de todas las herramientas posibles para realizar sus tareas con garantías y seguridad.
Para todo ello, hemos iniciado varios proyectos:
– Un servicio de cuidados y atenciones del hogar que posibilite y mejore la calidad de vida. Con una atención integral y personalizada. Con coordinación y mediación ante situaciones complejas o especialmente complicadas. Cuidando también a los cuidadores y cuidadoras. Atendiendo a los cuidados personales, las necesidades del hogar y las necesidades más específicas.
– Una escuela de cuidados en la que aprender colectivamente y compartir experiencias y conocimientos. Contando con la colaboración de profesionales de diferentes ámbitos que conjugan la formación teórica y práctica.
– Una iniciativa para crear oportunidades laborales mediante la distribución de productos ecológicos y artículos de producción artesanal. Intentando generar así opciones ante la precariedad y la exclusión.
Hasta ahora hemos conseguido pequeñas victorias que nos motivan para seguir adelante y creer que sigue siendo posible y necesario aquello por lo que apostamos.
Paso a paso
Desde un primer momento sabíamos que el camino estaba lleno de dificultades y que construir proyectos sociales desde la horizontalidad, la autonomía y la crítica no sería fácil, sobretodo si queríamos crear una alternativa que fuera real, sostenible y duradera. Durante todo este caminar nos hemos dado cuenta de que la construcción de proyectos tan ambiciosos requiere de tiempo y muchos esfuerzos. Que la sostenibilidad, la búsqueda de fuentes de financiación y la voluntad por no renunciar a unos principios básicos son grandes desafíos que afrontar. Es por ello que no queremos dejar de recordarnos continuamente que la solidaridad, la cooperación y el apoyo mutuo entre individuos y colectivos son la gran baza que juega a nuestro favor frente a las trabas que nos opone este sistema.
Os animamos a conocernos y colaborar con nosotros y nosotras. También a apoyarnos económicamente mediante cuotas solidarias. Solas no podemos, entre todas sí!
Para más info:
