Página en Blanco.
Elio Castaño.
Miembro de Faciendo dende les bases.
Siempre he considerado esta revista como un medio de comunicación de doble dirección. En uno de los extremos de esta comunicación estamos quienes damos nuestra opinión a través de los artículos publicados y en el otro quienes los leen.
Sin embargo, a quienes estamos en esta parte nos ha parecido que había un vacío de respuesta desde la otra. Nos llegan pocos comentarios a nuestras preguntas y planteamientos, en muchos casos no nos llega ni nuestro propio eco.
La primera intención que tuve para esta página fue dejarla en blanco para provocar en cada uno de vosotros y vosotras la necesidad de transmitirnos vuestras propias reflexiones sobre los temas que nos ocupan. Pero no he sido suficientemente atrevido. Tal vez porque pertenezco a esa tradición de realizar cambios con largo recorrido y no de un día para otro. Y no porque no sea partidario de cambios radicales, cambios que vayan a la raíz de los problemas y que intenten buscar soluciones para atajarlos, yendo más allá de cambios de apariencia que no hacen otra cosa más que disfrazarlos, porque siempre hay alguno que saca partido de esos problemas, y no solucionarlos es una buena situación para ellos.
El resultado es que vuelvo a ser yo el que me encuentro delante de una página en blanco. Aunque espero que en el futuro las palabras que se dibujen sobre el fondo blanco de alguna de las páginas de esta revista provengan de vosotros y vosotras; sean vuestras opiniones sobre temas tratados o la introducción de temas nuevos. Porque considero que eso forma parte de vivir de otra manera, de reconstruir la democracia.
Hemos llegado a un momento en el que la búsqueda de formas diferentes de vivir únicamente se entiende bajo premisas que contemplen profundas raíces democráticas. Y el punto de partida no lo concibo sin una participación plena en todos los ámbitos de la vida. Por eso me gustaría que también este espacio, donde algunos ponemos de cuando en cuando nuestras reflexiones, sea otro punto de encuentro más en busca de formas diferentes de relacionarnos, de opinar, de participar, en definitiva, de ir construyendo, o al menos ideando, colectivamente otros modelos.
A modo de provocación garabateo está página en blanco. A la espera de que otras personas sigan haciendo este ejercicio tan saludable de ponerse delante de un papel para dejar constancia de las reflexiones que rondan por nuestras cabezas. Ejercicio que nos obliga a hacer concreción y síntesis de planteamientos para poder trasladarlos de forma más inteligible, al mismo tiempo que rompe la barrera del espacio, pudiendo ser leído sin necesidad del contacto físico que necesita la expresión oral.
Pues bien, aquí me paro yo y os paso el testigo, la pluma o el teclado para que alguien continúe aportando alguna reflexión para no dejar en blanco esta página. Para que sigamos teniendo conocimiento de experiencias como las que en este número se relatan, que son el germen del que surgirán nuevas formas de convivencia.
